La decoración con plantas sigue en aumento y todos siempre
han tratado de tener su propio mini-jardín, pero no a todos les ha resultado
fácil y a muchas personas y me incluyo se nos a terminado marchitando nuestras
plantas ya que muchas veces compramos las que nos atraen, pero no nos
interesamos por los detalles del cuidado de la misma los cuales son muy
importantes ya que decidirán el tiempo de vida de la planta.
A continuación, vamos a presentar plantas que cualquier
persona como tu y como yo podremos cuidar sin ningún esfuerzo ni problema.
Hiedra común o Enredadera
Una de las plantas
más comunes y una de las pocas que se adapta tanto a climas de exterior como
interiores. Por eso es muy común verla tanto tapando fachadas o verjas
exteriores como en macetas interiores, así como decorando paredes y superficies
amplias. Esta planta crece a ritmo frenético; tanto, que puede llegar a crecer
hasta 40 centímetros cada año.
Cuidados: Debido a su rápido crecimiento, el único
requisito para alargar la vida de la Hiedra común es podarla correctamente y de
forma asidua. Para ello, se recomienda hacer un despunte de los bordes guía una
o dos veces al año. Lo ideal es hacerlo en febrero o marzo, para que salgan
brotes nuevos en primavera.
Cactus
Es la planta de interior por excelencia y, de hecho, una de
las precursoras de la fiebre por hacer que la vegetación forme parte de la
decoración de nuestro espacio. Las especies de Cactus existentes son casi
infinitas, se adaptan a todos los gustos y espacios, ya que los hay de todos
los colores, formas y tamaños. Si vas a adentrarte en el mundo de las plantas
de interior, lo mejor es que empieces con un cactus, son casi inmortales.
Cuidados: Los cactus no necesitan casi nada para
sobrevivir. Eso sí, grábate lo si vas a comprar te uno: no necesitan casi nada
para sobrevivir. Ni siquiera agua. De hecho, pueden sobrevivir un invierno
entero casi sin agua. Así que olvídate de regar lo a diario o, entonces, morirá.
Tampoco soportan los climas muy fríos ni húmedos (no olvidemos que su origen es
desértico).
Poto
Es la estrella de las plantas de interior, por su
resistencia y durabilidad sin demasiados cuidados. Se trata de una planta
originaria de Asia cuyas hojas son perennes (no caen en otoño) y pueden
encontrarse en varias tonalidades: verde claro, verde oscuro, o con manchas
blancas y amarillas. Además, los tamaños y formas pueden ser distintas según su
edad o cómo lo moldeemos (sus ramas y hojas crecen muchísimo por lo que podemos
hacerlo crecer en forma de árbol o haciendo que cuelguen.
Cuidados: Como decíamos, son fáciles de
llevar. Basta con regar el Poto una vez a la semana; se recomienda instalar un
plato hondo bajo la maceta y echar agua para que la propia planta la vaya absorbiendo.
Además, se aconseja no exponerlo a luz muy directa y mantenerlo en una
temperatura de entre 17 y 30 grados.
Eucalipto
Esta es, posiblemente, la planta más difícil de encontrar para decorar interiores. El Eucalipto cuenta con cientos de especies diferentes, pero casi todas son de exterior, por lo que no es sencillo encontrar una que se adapte a interiores. Eso sí, son idóneas para tener en casa porque son excelentes filtradoras del aire y sus hojas están llenas de taninos, por lo que solo con aspirar su aroma, ello puede contribuir a solucionar pequeños problemas de congestión nasal y a evitar los resfriados.
Cuidados: El Eucalipto tampoco es demasiado
exigente en sus cuidados. El riego debe ser moderado, debemos dejar secar la tierra
antes de volver a regar la e, incluso, es aconsejable retirar el agua sobrante
para evitar que se pudran las raíces. Además, se recomienda mantenerla en una
zona luminosa y, en los meses de invierno, tenerla en una habitación cálida
para evitar las bajas temperaturas.